Correr, caminar, pedalear, trepar, nadar, saltar...Trabajar y VIVIR. La diabetes, una anécdota.

Siempre y cuando controlemos el ejercicio y nuestra glucemia en sangre. Esta enfermedad que junto con la obesidad está considerada la epidemia del siglo XXI permite llevar una vida activa perfectamente normal gracias a médicos e investigadores, profesionales apasionados que no dejan de trabajar para que mañana sea de verdad una anécdota. Hay dos tipos principales de diabetes: Tipo I y tipo II. La primera es la mía, la insulino-dependiente o también llamada infantil, porque en un alto porcentaje de casos se presenta a edades tempranas, aunque yo "debuté" con esta enfermedad a los 44 años. Mi sistema inmune falló y atacó a las células del páncreas que producen la insulina sufriendo a continuación los tres síntomas del libro o las "tres Pes": Poliuria (orinar mucho), Polidipsia (sed horrible a todas horas) y Polifagia (hambre, hambre, haaaambre).



¿Porqué a mí? Pensé. A mí que toda la vida he hecho deporte, que sólo tres meses antes terminé mi Cuarta Maratón en Donosti, a mí que no fumo, a mí que soy un chico formal: Buen padre y ejemplar esposo, a mí que hago la declaración de renta puntualmente y pago la contribución urbana y el impuesto de circulación religiosamente cada año... ¿Porqué?



El estrés que tantos sufrimos en mayor o menor grado, herencia genética, un catarro mal curado, la contaminación, el agujero de la capa de ozono... Médicos, familiares, amigos, vecinos y yo mismo apuntamos una u otra causa, pero lo cierto es que daba lo mismo. El caso es que mi cuerpo -mi páncreas- casi no tenía reservas de insulina y que ya no iba a producir más -o muy poca- y que iba a necesitar "pincharme" insulina todos los días.

domingo, 20 de enero de 2019

Mi cumple en Territorio Nafarroa Xtrem

Qué mejor manera de celebrar mi cumple que pillar fiesta y salir al monte.  Con Ascen, Sonia, Roberto y Carlos, que este martes 15 de enero también tenían la manaña libre.

Sonia se ha inscrito a la Nafarroa Xtreme de 68 kmts y como le tiene mucho respeto a su primera incursión en una ultra quiere meter entrenos duros. Tan duros como la Nafarroa de 33 kmts -hermana menor de esa ultra-. Ya estuvo con Ascen hace dos semanas completando ese recorrido y cuando nos dijeron que lo iban a repetir, nos sumamos Roberto, mi tocayo Nuin y servidor.  En su primer entreno sufrieron algún despiste y casi se les hizo de noche pues entre vueltas y revueltas les salieron más de 36 kilómetros.

Hoy esperábamos no tener problemas con el navegador gps de Carlos Nuin y mis habilidades con el wikiloc pero resulta que el navegador se quedó sin batería y con mi móvil tendremos las mismas dudas y despistes que nuestras dos amigas en los mismos sitios que ellas hace dos semanas. Por suerte saldremos del apuro sin dar muchas vueltas y "solo" añadiremos un kilómetro a los 33 de la excursión. Con un desnivel de más de 1500 mts la Nafarroa 33 no es ninguna tontería.

En Zubiri a las 8:10 de la mañana. Con Roberto, Ascen, Sonia y Carlos Nuin

La mañana es fresca y ha helado pero el sol nos calienta un poco cuando cogemos altura.

Siempre es una gozada correr por estos rasos

El blanco helado de la hierba contrasta con el bosque soleado

El bosque de hayas en Invierno deja pasar toda la luz del sol, qué diferencia con la oscuridad del verano cuando las ramas se cubren de hojas...
 



Dentro del bosque y de la niebla hacía frío pero en las faldas del Adi la temperatura subió varios grados: Inversión térmica.




 
Cima del Adi

Ahí abajo está Zilbeti y en el horizonte, a la derecha de la Higa se distingue el Moncayo.

Un mar de nubes se extiende al Norte de la divisoria. Hacia el Este vemos el Ori con algo de nieve y las cimas de Larra y de Huesca blancas también.
Un día magnífico
La ruta es dura porque además del Adi hubo más subidicas y bajadicas...

El embalse de Eugui
Eugui
Presa de Eugui. Roberto y Ascen corren por un precioso camino a media ladera.

Río Arga desde el Puente de Saigots
Una mañana fantástica que nos enseñó rincones nuevos -al menos para mí- y senderos preciosos como el que asoma sobre las aguas del pantano de Eugui, que te lleva casi llaneando hasta Saigots y Zubiri. Eso sí, la excursión nos llevó algo más de seis horas mientras que el record de la prueba está en 02:47 ¡madre mía! Claro es que los campeones no se paran a hacer fotos...

Todas las fotos aquí.

Mis glucemias: 93 a las 6:26 de la mañana. Una unidad de novorapid y desayuno un café con leche y un puñado de almendras. Durante la excursión solo bebí agua y comí dos trozos de pastel de naranja con chocolate que nos ofreció Sonia ¡riquísimo! Es parecido al pan de higo con nueces y lo podemos encontrar en los supermercados Aldi. Al terminar y después de cambiarnos entramos en el bar del polideportivo de Zubiri donde devoramos un plato de chistorra que mis compas acompañaron con cerveza y yo con vino. No me puse insulina y en casa a las 15:57 tenía 175 (comí dos cachos de pan con la chistorra). Cero controles durante la excursión pues tenía buenas sensaciones y la confianza que me da poner una sola unidad de insulina en el desayuno: Pocos hidratos de carbono y poca insulina garantizan un mejor y más sencillo control de la diabetes. ¡¡Gracias Jorge García-Dihinx!!



No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Haz un comentario!