Correr, caminar, pedalear, trepar, nadar, saltar...Trabajar y VIVIR. La diabetes, una anécdota.

Siempre y cuando controlemos el ejercicio y nuestra glucemia en sangre. Esta enfermedad que junto con la obesidad está considerada la epidemia del siglo XXI permite llevar una vida activa perfectamente normal gracias a médicos e investigadores, profesionales apasionados que no dejan de trabajar para que mañana sea de verdad una anécdota. Hay dos tipos principales de diabetes: Tipo I y tipo II. La primera es la mía, la insulino-dependiente o también llamada infantil, porque en un alto porcentaje de casos se presenta a edades tempranas, aunque yo "debuté" con esta enfermedad a los 44 años. Mi sistema inmune falló y atacó a las células del páncreas que producen la insulina sufriendo a continuación los tres síntomas del libro o las "tres Pes": Poliuria (orinar mucho), Polidipsia (sed horrible a todas horas) y Polifagia (hambre, hambre, haaaambre).



¿Porqué a mí? Pensé. A mí que toda la vida he hecho deporte, que sólo tres meses antes terminé mi Cuarta Maratón en Donosti, a mí que no fumo, a mí que soy un chico formal: Buen padre y ejemplar esposo, a mí que hago la declaración de renta puntualmente y pago la contribución urbana y el impuesto de circulación religiosamente cada año... ¿Porqué?



El estrés que tantos sufrimos en mayor o menor grado, herencia genética, un catarro mal curado, la contaminación, el agujero de la capa de ozono... Médicos, familiares, amigos, vecinos y yo mismo apuntamos una u otra causa, pero lo cierto es que daba lo mismo. El caso es que mi cuerpo -mi páncreas- casi no tenía reservas de insulina y que ya no iba a producir más -o muy poca- y que iba a necesitar "pincharme" insulina todos los días.

sábado, 28 de agosto de 2010

Un entreno largo: La Vuelta a Pamplona

El Otoño es la estación idónea para correr la Carrera por excelencia: La Maratón, con sus 42 kilómetros y 195 metros. Una prueba dura y exigente en la medida que nosotros mismos nos exijamos, pues no es lo mismo correrla en 4 horas que en tres. Ni en 3:15 que en 3:30, y es que cada minuto que consigamos rebajar nuestra marca personal los que ya hemos competido en esa distancia, nos supondrá un trabajo y entrenamiento previo.

Un entrenamiento que en mi caso particular me gustaría consistiera en unos 80 / 90 kilómetros semanales, lo que se debería traducir en al menos 5 días de correr en distintas distancias y ritmos: Una hora un día, otro día series... Y sobre todo, en casi todos los manuales aconsejan hacer una tirada larga un día a la semana, preferentemente en fin de semana que es cuando más tiempo tenemos.

Entre 28 y 30 kilómetros es una buena distancia para que nuestras piernas estén preparadas el día D. Viviendo en Zizur Mayor, en la Cuenca de Pamplona, es imposible encontrar un recorrido sin cuestas, pero eso será una ventaja si pensamos que de ese modo haremos un trabajo extra que nos hará más fuertes para enfrentarnos a los 42.195 metros más o menos llanos, que es lo que te prometen en casi todas las maratones urbanas.
Con la salida y meta muy próximas a mi casa, hace años que vengo haciendo una vuelta alrededor de Pamplona. El itinerario tiene 28 kilómetros, es muy ameno y en buena parte discurre a la orilla de tres rios: El Arga, que es el principal y rodea casi toda la ciudad a los pies de sus murallas; el Elorz y el Sadar, más humildes puesto que nacen muy próximos a la capital navarra y sus cuencas son mucho más pequeñas. Pero los tres proporcionan un corredor verde idóneo para que nuestro recorrido goce de buenas sombras que alivien nuestro paseo, especialmente si empezamos a meternos caña en verano y las temperaturas son elevadas.

En las últimas semanas he dado esta vuelta en tres ocasiones:

El Sábado 7 de agosto, en 2h 15 minutos. Mi glucemia antes del desayuno: 197, y al terminar 117, tomé dos geles y dos barritas de frutas. La temperatura entre 20 y 28 grados (calorcita).

El Domingo 15, en 2h 11 minutos. 128 antes del desayuno. Sólo tomé un gel y una barrita de frutas. Me encontré de cine todo el tiempo y ni me tomé las glucemias el resto del día. La temperatura entre 15 y 22 grados y me llovió un poco en los primeros kmts. (fresquito ideal).

El Domingo 22, en 2h 19 minutos. 151 antes del desayuno, un gel y dos barritas. 74 después de la carrera. Muchísimo calor: 22 grados a las 9, que subieron a 30 a las 11. Debí madrugar más pero el dia anterior llevé mala vida, lo que explica en parte el "mal" crono.


Aprovechando las vacaciones he salido un par de días con la bici para hacer algunas fotos.

viernes, 27 de agosto de 2010

Adi por Sorogain y el Bosque de Odia.

Viernes 20 de agosto, desde Zizur nos llegamos Sergio, Julen y yo hasta Casa Pablo, en mitad del verde valle de Sorogáin. Altitud: Algo más de 800 metros, la cima del Adi 1451 mts. no es mucho el desnivel y además el itinerario nos llevará por el magnífico Hayedo de Odia: Una sombría catedral en cuyo interior no entran los rayos del sol, el sol que estos días de verano ha empezado a calentar a tope, subiendo los termómetros bastante por encima de los 30 grados en toda Navarra.

Sergio y Julen no son lo que se dice unos montañeros consagrados, aunque estamos en ello y todo se andará ¿verdad? Por eso se asustan un poco cuando ven la cima del Adi allí arriba tan alta, toda pelada de árboles, dominando los oscuros bosques de hayas de su base.



La primera parte de la subida por el bosque discurre junto a las regatas que recogen las aguas de la montaña, todas se juntan formando la regata de Odia - Odia Erreka -, y su murmullo nos acompaña poniendo una nota sonora y alegre. Conforme ganemos altura irán menguando su caudal hasta que el silencio se haga por completo en el bosque, sólo interrumpido por las hojas que movemos a nuestro paso.



Al salir del bosque a los rasos de hierba en el lomo de la montaña, el sol está en su cenit, pero un flojo viento que sube desde el valle nos refresca y permite terminar la ascensión sin mayores agobios.

Por estos puertos hubo en otro tiempo no muy lejano bastante circulación de gente: Contrabando, fugas a Francia de presos políticos en el franquismo, paso de soldados aliados en la II Guerra Mundial... Podemos ver puestos de vigilancia construidos por el ejército español en un intento de controlar ese trasiego.
En la cima del Adi no se está nada bien: Casi no pega aire y una nube de moscas no nos deja parar, así que descendemos unos metros por la ladera norte para poder descansar a gusto. El almuerzo lo haremos abajo del todo, sentados en lo alto de un puesto de vigilancia a la sombra de unas hayas.

Mis glucemias: Antes del desayuno, a las 7:32 = 89; al principio de la excursión, a las 11:03 = 87; bajando, después de almorzar y a las 13:11 = 222, culpa de la tarta de queso de Julen, de la que comí tres trozos; en casa después de comer a las 16:18 = 152.


Panorama desde la cima de Adi: Debajo nuestra el pueblo de Zilbeti, completamente rodeado por el bosque y la montaña, a la derecha más bosques y los altos puertos de Velate con el Saioa (1418 mts)dominando la región. Más fotos aquí.

jueves, 12 de agosto de 2010

Zarauz 8 de agosto.


En principio, mi idea para el domingo pasado era una excursión familiar a Sorogáin para subir el Adi con los chavales, pero la cuadrilla votó por unanimidad ir a la playa. Bueeeeno, vale, pues vamos a la playa. ¿Y a qué playa? ¿A Fuenterrabía? No, que es muy sosa ¿A Hendaya? No, que está en Francia y allí son más sosos aún. ¿A Zarauz? ¡¡Sí a Zarauz!! Pues vale, el Adi y el valle de Sorogáin se quedarán para el Otoño que además es cuando más bonito estará.

Y allá que nos fuimos toda la tropa: Belén con Unai; Peio y Esther con Sergio; Pilar y Santi con Pablo; Juan y Loli con Xabier e Ibai y servidor con otro Sergio. Allí se nos unirían también Juan con Iván y Daniel.
Peio, Juan, Servidor de ustedes y Santi: Somos los mejores.

Si algo tiene de bueno vivir en la Cuenca de Pamplona es que tenemos Donosti a menos de una hora y otros sitios de la costa como Zarauz o Fuenterrabía en poco más. El Cantábrico no tiene el buen tiempo garantizado como el Mediterráneo, pero salvo mala suerte con la previsión, el viernes ya puedes saber si vas a tener Sol o no. Y este domingo tocaba bueno, sol lo que se dice sol y cielo azul del todo no tuvimos al final; pero la verdad es que disfrutamos de un día bastante bueno.


La playa de Zarauz es larga, unos 3 kilómetros; el mar casi siempre está movido y sólo puedes nadar regulín a pocos metros de la orilla, porque además la resaca te lleva para adentro a la menor - bandera amarilla-; están delimitadas las zonas para surf y para baño, pero con todo, el espectáculo del Cantábrico rompiendo en blanca espuma y ese olor profundo a mar que tanto tiempo llevas sin sentir, hace que la visita siempre valga la pena.

Nos olvidaremos de la odisea de aparcar, del vino infumable que nos pusieron para comer y de la frustrada visita que los chicos hicimos a la zona nudista (¡Sólo había una pareja de abuelos en pelotas!). Nos reímos, gozamos de la brisa, de la arena y disfrutamos de la mejor compañía. ¿Cuándo hacemos otra?

Más afotos aquí.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Peña Canciás, 1 de agosto.


Octava edición y la tercera vez que hago esta carrera de montaña: 28 kmts y 1600 mts de desnivel positivo acumulado. Salida de Fiscal -750 mts- y todo para arriba hasta la cima de Peña Canciás -1920 mts-. El recorrido discurre por sitios especialmente bonitos y arriba puedes disfrutar de buenísimas vistas hacia los tresmiles de Ordesa al Norte y la Sierra de Guara al Sur, además de muchos otros montes pues estás en el corazón de la montañosa comarca del Sobrarbe.

En las dos primeras ediciones (2003 y 2007 creo) lo pasé especialmente mal por el calor que se pasa en la última parte que discurre por la parte baja del valle, por una pista forestal a pleno sol que en sus últimos 4 kilómetros hace sufrir a todos con pequeñas subidas y bajadas. Este año en cambio he comprobado que a pesar del calor mis piernas y mi caja tenían gasolina suficiente para mantener un buen ritmo, adelantando en esa zona a unos 4 corredores.

Corto y pego mi crónica publicada en el foro de El Atleta:

"¡¡Vaya fin de semana movidito!! A mi por lo menos me ha cundido como el puente de la consti: El Sábado todo el día en la piscina con la familia y amigos, niños y mayores alrededor de una paella que bastó para los doce que eramos y eso que algunos repitieron hata ¡¡3 veces!! Como hacía bueno terminamos también cenando a base de bocatas y prontico a la cama (las 11)

El domingo a las 5 arriba, desayuno, me preparo y salgo de Zizur (Pamplona) a las 5:50 para llegar a Fiscal a las 8:10 ¡¡Mecagoenelcotefablo!!

Besos y abrazos a los colegas, sobre todo Sarrios ¡¡Cuántos!! De Zaragoza muchos Sarrios y de las 7:45. Manu y familia no falla, igual que David (Rebu) que han dormido en el camping. Otros han dormido por ahí en plan hippie (gente de mal vivir ¿o de bueno?). Ambargreen me dice que los glóbulos rojos le salen por las orejas porque lleva mogollón en Benasque de vacances, Cafuu todavía más moreno que el año pasado, Vitorián más jóven (desde que el médico le dijo que hiciera deporte no para), Jamuro más flaco, Jorge más alto (los junior crecen hasta los 30 ¿no?) y Ramón más feo pero con su buen humor de siempre. Me dejo a muchos pero en fin, pues eso, que el ambiente cojonudo y que si no fuera por el dorsal que nos dan nos habríamos quedado echando cervezas en el bar.Fila de arriba de izq a dcha: Jorge Jariod, Manumar, Monrasin, Reburun, Teito y Cansamontañas -que soy yo-; abajo: Cafuu y Vitorian. Buena tropa.

Salimos pasadas las 9, el sol pica y promete -¡¡ay ay ay!!-, primeros metros de asfalto y también los segundos, que nos llevan por las inmediaciones de esa carretera que lleva en obras desde que eramos jóvenes (mucho tiempo). Correteo a buen ritmo junto a Vitorian, pero pronto me deja por otro que corre más y se lanza en pos de Ambargreen. Como he salido con los primericos me adelantan algunos más pero no muchos, entre ellos la primera chica, que es una morenaza alta y guapetona del País Vasco. Todos se van para adelante y yo sigo a buen ritmo, ahora por pista forestal. El sol nos sigue pegando hasta que valle arriba cambiamos de vertiente y conseguimos una poca más de sombra de los árboles. Me pasa la segunda chica, también es alta y guapetona pero me fijo que es super-delgada ¡¡mecachis y corre más que yo!! No puede ser, aumento el ritmillo y consigo mantenerme unos metros detrás de ella y otros tres corredores..."Leer más.

Clasificación.

Fotos en los blogs de Monrasin y JJariod.