Correr, caminar, pedalear, trepar, nadar, saltar...Trabajar y VIVIR. La diabetes, una anécdota.

Siempre y cuando controlemos el ejercicio y nuestra glucemia en sangre. Esta enfermedad que junto con la obesidad está considerada la epidemia del siglo XXI permite llevar una vida activa perfectamente normal gracias a médicos e investigadores, profesionales apasionados que no dejan de trabajar para que mañana sea de verdad una anécdota. Hay dos tipos principales de diabetes: Tipo I y tipo II. La primera es la mía, la insulino-dependiente o también llamada infantil, porque en un alto porcentaje de casos se presenta a edades tempranas, aunque yo "debuté" con esta enfermedad a los 44 años. Mi sistema inmune falló y atacó a las células del páncreas que producen la insulina sufriendo a continuación los tres síntomas del libro o las "tres Pes": Poliuria (orinar mucho), Polidipsia (sed horrible a todas horas) y Polifagia (hambre, hambre, haaaambre).



¿Porqué a mí? Pensé. A mí que toda la vida he hecho deporte, que sólo tres meses antes terminé mi Cuarta Maratón en Donosti, a mí que no fumo, a mí que soy un chico formal: Buen padre y ejemplar esposo, a mí que hago la declaración de renta puntualmente y pago la contribución urbana y el impuesto de circulación religiosamente cada año... ¿Porqué?



El estrés que tantos sufrimos en mayor o menor grado, herencia genética, un catarro mal curado, la contaminación, el agujero de la capa de ozono... Médicos, familiares, amigos, vecinos y yo mismo apuntamos una u otra causa, pero lo cierto es que daba lo mismo. El caso es que mi cuerpo -mi páncreas- casi no tenía reservas de insulina y que ya no iba a producir más -o muy poca- y que iba a necesitar "pincharme" insulina todos los días.

domingo, 15 de enero de 2017

Galar Trail Blanco

Ha llegado la lluvia, el frío... y la nieve a los montañas. Después de muchas semanas de nieblas y cielos azules el agua ha vuelto a ser protagonista  llenando los caminos de barro y nieve. Qué mejor manera de disfrutar una mañana de Domingo que salir a ensuciar las zapatillas...

Hemos quedado a las 8 en Arlegui, cerquita de Pamplona en la Cendea de Galar, donde tendrá lugar el próximo 5 de marzo la III Edición de la Galar Trail: 18 kmts y 1000 mts de positivo acumulado por la Sierra de Erreniega (El Perdón). Nuestra intención era seguir el recorrido de la prueba con sus tres subidas incluídas pero lo hemos dejado en dos recortando un poco aunque de todos modos nos han salido más de 17 kmts.

Dos o tres grados de temperatura y una poca de agua nieve no nos han asustado. Ha estado casi toda la noche jarreando así que suponemos que tendremos nieve arriba. Lo que tenemos en los primeros metros de la subida es barro que enseguida pasa a ser nieve sopa, nos mojamos los pieses en el agua helada pero confiamos en que vuelvan a calentarse con el ejercicio...Y es que el ritmo que imponen Jorge, Iván y Alejo en la cabeza del grupo no es de pasear precisamente. Fernando, Pello, Eric, Iñigo y yo cerramos la marcha más o menos en ese orden.  Mis colegas no respetan que es mi cumple aunque sea el más abuelo del grupo... ¡¡No vengo más!! les grito de cachondeo, ya saben que estoy bromeando pero sí es verdad que mi motor diesel no puede salir tan rápido como el suyo en los primeros metros, ¡¡esperar que pille temperatura cabrones!!!

Más arriba nos olvidamos del chipi chapa del agua, barro y nieve sopa: ahora todo es nieve seca y nuevecita que el cielo ha descargado generosamente durante toda la noche, toneladas de nieve que cubren de blanco absolutamente todo: bojes, pinos, quejigos y espinos se han hundido encima del camino y cada dos pasos debemos agacharnos, arrastrarnos o rodear para poder pasar.  Un verdadero ejercicio de core sí señor donde al principio se resienten los riñones, uffff...

Pedazo foto de Eric


Alejo abrirá huella casi todo el rato en esta primera subida, ¡qué campeón! eso supone un cincuenta por ciento más de esfuerzo y si además te comes casi toda la nieve pegada a las ramas, hace falta mucha fuerza.  Cuando más arriba dejamos el camino (por cierto es el GR220) y salimos a la pista podremos "correr" casi dos kmts hasta que asomamos arriba de la sierra entre el cuarto y quinto molino.  Allí pasamos a la vertiente sur y nos tiramos monte abajo con alegría. Yupiiii!!!

Al perder altura la nieve pasa de nuevo al estado de "sopa blanca" y nuestros pies vuelven a helarse literamente. Chapoteamos en las balsas de agua que interrumpen la pista cada dos por tres y nos obligamos a correr lo más rápido que podemos con la esperanza de que así no nos congelaremos.  Hace frío y todavía hace más durante la segunda subida porque el aire nos pega de lado. Los pies vuelven a entrar en calor pero nuestras manos no tienen la misma suerte, conseguimos salvarlas metiéndolas dentro de los puños del chubasquero y es que los guantes totalmente mojados apenas sirven para nada...  Esta subida se la comieron abriendo huella Jorge e Iván codo con codo. Increíble el sentido de orientación de nuestro campeón del Deportivo Navarra, Jorge Urquizu, que nos guió de cine y os juro que el camino no se veía.  Yo tenía la ruta de la Galar Trail 2016 en el móvil pero solo tuve dedos para sacarlo en una ocasión comprobando que íbamos justo siguiendo el recorrido. ¡¡Bravo!!

Han pasado la quitanieves por la carretera de los molinos, estamos arriba de las Palomeras cuando oímos unas voces: es Angel, de Subiza ¡nuestro amigo Bakaioko! el campeón de Adi-Ike que también ha salido a disfrutar de la montaña blanca que se levanta encima de su pueblo.  ¡¡Qué gozada comprobar que no somos los únicos locos del mundo!!

No señor, no somos los únicos: suben dos coches normales por la carretera que a pesar del quitanieves está blanca y helada... En fin.   Nos cruzaremos también con otros dos chavales a quienes conocemos de otras aventuras ¡qué pequeño es el Perdón!

La nieve helada cubre las paredes de la ermita de la Virgen del Perdón, la miramos de reojo y proseguimos nuestra carrera que pronto deja la carretera para buscar el camino que cae sobre Esparza y Arlegui. Dudamos entre bajar por la pista o el GR220 donde los arbustos nos van a joder los chubasqueros pero por ahí es más corto ¡¡ya los coseremos!!

Y así, por el sendero donde nos hemos arrastrado resollando en la subida resoplamos volando en la bajada ¡¡Yujuuuuu!!

Casi en Arlegui nos cruzamos con cuatro chavales que empiezan su excursión también en zapatillas como nosotros. ¡¡Qué locos!!

Con Eric, Iñigo, Jorge, Iván, Alejo y Fernando

La foto nos la hizo Pello, nuestro amado presidente. Iñigo está a su lado disfrutando como un enano ¡¡aúpa los de Lerín!!



Añadir leyenda


Guapas fotos de Eric





Nuestros amigos de Trizurko, Txitxo e Iñigo han tenido la misma idea que nosotros pero se han ido a la Higa de Monreal. ¡¡Gracias campeones!!  








Nos ha faltado la bajada a Subiza y subir luego por las Palomeras. Mi garmin.

 El próximo 5 de marzo tendrá lugar la III Edición de esta carrera al lado de casa: 


2 comentarios:

  1. ¡Menuda nevada, amigo! y ¡Qué fuertes estáis todos por allí!
    En esta zona centro donde yo habito, frío hace, pero la nieve aún la estamos esperando. Ya llegará, a lo mejor.
    Salud y Montaña, Carlos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Salud y montañas sí señor!! Pues fíjate que el 80% de esa nieve se ha fundido esta mañana que hemos amanecido con 7 grados...Así bajaban los ríos claro.Lunes por lo noche ahora, tenemos lluvia débil y el mercurio bajando, mañana volveremos a tener blancos los montes próximos pero ya no será ese paquetón. Un abrazo y abrígate!!!

      Eliminar

¡Haz un comentario!