Correr, caminar, pedalear, trepar, nadar, saltar...Trabajar y VIVIR. La diabetes, una anécdota.

Siempre y cuando controlemos el ejercicio y nuestra glucemia en sangre. Esta enfermedad que junto con la obesidad está considerada la epidemia del siglo XXI permite llevar una vida activa perfectamente normal gracias a médicos e investigadores, profesionales apasionados que no dejan de trabajar para que mañana sea de verdad una anécdota. Hay dos tipos principales de diabetes: Tipo I y tipo II. La primera es la mía, la insulino-dependiente o también llamada infantil, porque en un alto porcentaje de casos se presenta a edades tempranas, aunque yo "debuté" con esta enfermedad a los 44 años. Mi sistema inmune falló y atacó a las células del páncreas que producen la insulina sufriendo a continuación los tres síntomas del libro o las "tres Pes": Poliuria (orinar mucho), Polidipsia (sed horrible a todas horas) y Polifagia (hambre, hambre, haaaambre).



¿Porqué a mí? Pensé. A mí que toda la vida he hecho deporte, que sólo tres meses antes terminé mi Cuarta Maratón en Donosti, a mí que no fumo, a mí que soy un chico formal: Buen padre y ejemplar esposo, a mí que hago la declaración de renta puntualmente y pago la contribución urbana y el impuesto de circulación religiosamente cada año... ¿Porqué?



El estrés que tantos sufrimos en mayor o menor grado, herencia genética, un catarro mal curado, la contaminación, el agujero de la capa de ozono... Médicos, familiares, amigos, vecinos y yo mismo apuntamos una u otra causa, pero lo cierto es que daba lo mismo. El caso es que mi cuerpo -mi páncreas- casi no tenía reservas de insulina y que ya no iba a producir más -o muy poca- y que iba a necesitar "pincharme" insulina todos los días.

domingo, 19 de julio de 2015

Mesa de los Tres Reyes y Petrechema

Del gris -casi negro- al azul -casi blanco- sólo hay un rato, pero el tiempo se estira y se hace largo cuando los rayos y la lluvia de la tormenta te obligan a buscar refugio y esperar que llegue la calma.

La tormenta se acerca desde el Sur: la cortina de agua cae sobre Ezkaurre
A las 8 menos cuarto de la mañana llegamos a Linza -Zuriza- en Huesca, seis campeones: Alejo, Antonio, David Senosiain y David Salinas, mi tocayo Carlos Nuin y servidor de ustedes.  Nos hemos levantado con truenos en Pamplona y aunque hemos dejado atrás la tormenta sobre la capital navarra, al llegar a Isaba y después a Linza hemos visto como llegaba otra desde el Sur.  Caían unas gotas mientras nos preparábamos junto al refugio -nuestro punto de partida-, pero reinaba el buen humor y nadie hablaba de olvidar nuestro plan: Subir a la Mesa de los Tres Reyes y después al Petrechema.


Y es que esta mañana me he juntado con unos tipos peligrosos, esa clase de gente que no se asusta por un trueno lejano y que no mira detrás suya las nubes negras que cada vez están más cerca.  No seré yo quien abra la boca para poner pero ninguno, así que me miro el azúcar y con 104 mg/dL agarro un botellín de Acuarius de medio litro y lo bebo de un trago (bueno de dos) y agarrando los bastones me pongo detrás del grupo camino arriba. ¡¡Vamosss!!

Mi tocayo Carlos Nuin es quien más animado va, insiste en que no hay que preocuparse y que al menos debemos llegar a la Hoya de la Solana, a mitad de camino, para tomar decisiones.  Y eso a pesar del pedazo de trueno que acabamos de escuchar.


Me consuelo un poco (muy poco) cuando adelantamos a un grupo de excursionistas con niños  y a una pareja de montañeros. ¡¡No somos los únicos inconscientes!!  Pero cuado me doy la vuelta y veo el panorama no me cabe duda de que nos vamos a mojar, y si sólo fuera eso...  Los truenos cada vez se oyen más cerca.

Diez minutos más tarde tenemos la tormenta encima: ráfagas de aire, lluvia y rayos que caen muy cerca nuestra nos determinan a dar media vuelta.  Poco antes habíamos visto una cabaña y sin pensarlo un segundo nos tiramos monte abajo fuera de sendero y por derecho hacia ella. Soy el último del grupo, está claro que mis colegas son unos campeones subiendo pero lo que es bajando y con rayos a tutiplén son unos fuera de serie.  Me quedan unos metros para llegar a la cabaña y el estampido de un trueno me pone los pelos de punta, tiro los bastones y aprieto a correr como un mozo en el encierro de San Fermín -prefiero cien miuras a un rayo encima mía- ¡¡socorroooo!!



Casi media hora después deja de llover y aunque sigue muy cubierto y oscuro decidimos continuar nuestra excursión.  Lloverá a ratos pero al menos el aparato eléctrico se ha terminado así que el único problema será quitarnos y ponernos el chubasquero cada dos por tres.  




David Senosiáin y Alejo 

David Salinas y Antonio ¡¡qué caras de frío!!

Cima de la Mesa

Agujas de Ansabere junto a Petrechema

Enseguida nos vemos bajo la Mesa buscando las mejores repisas que ascienden a la cima, el aire sopla muy fuerte y nos agachamos por miedo a salir volando, echando mano a las piedras ¡¡socorro!!  Llegados arriba sólo quedan unos metros hasta la estatua de San Francisco Javier junto a la maqueta de su Castillo, pero dejaremos esa foto para otro día, tal es el viento que nos azota...  Estamos en el punto más alto de Navarra justo aquí también está el límite con Aragón y con Francia, pero por más que miramos no vemos a los Tres Reyes, con este día seguro que no se han levantado de la cama o están jugando al golf en Salou, eso será...                                                    

En dos saltos nos vemos de nuevo en la base de la montaña y decidimos hacer un alto para almorzar aprovechando un abrigo.  

Una parada para almorzar con el Petrechema en el horizonte

Muchas risas durante toda la excursión y más ahora que se van las nubes y se aclara el panorama. Mis compañeros no han dejado de hablar y bromear en ningún momento, ni siquiera cuando hace un rato pensábamos que se nos llevaba el aire, eso sí Alejo: no me des en el trasero con los bastones porfi, que al final me va a gustar... No es necesario decir que Salinas no ha callado ni en las peores cuestas y lo interesantes que son las batallas contadas por Carlos Nuin y por Antonio, dos pájaros de cuidado que ya saben lo que es el Tor des Geants o la Ultra Mitic de Andorra.  Alejo, Antonio, Carlos y yo participaremos dentro de 7 días en la Aneto-Posets mientras que Salinas lo hará en la Vuelta a Aneto, no tendría problema en repetir la ultra pero su objetivo este año son las 100 millas en la Sierra de Madrid, llave para la super ultra del 2016. 

Diez minutos para almorzar y enseguida continuamos la bajada cruzándonos con algún grupo de excursionistas que también han sabido esperar esta mejoría en el tiempo.  A la vuelta de unas piedras nos topamos con unos chavales y ¡¡sorpresa!! Ahí están Jesús Casabona, Asier y Xabier San Martín junto con otros amigos que también se dirigen a la Mesa.  Es una alegría encontrarme con los hijos de mis amigos ¡¡qué viejo soy jajaja!!


El abuelo Cansamontañas con la chavalería  ¡¡Bravo campeones!!
Llegados a la Hoya de la Solana cogemos la bifurcación que nos lleva hacia Petrechema, nuestro segundo dosmil a donde llegaremos en poco rato. Arriba son las 12:40 y tengo 246 de azúcar, así que me pongo dos unidades de novorapid para comer el medio bocata de nocilla que tengo, con eso y el isostar del camel podré mantener el ritmo de la cuadrilla en nuestra carrera cuesta abajo hasta el refugio.

Primeros metros de subida a Petrechema

La cuadrilla más animada en la cima del Petrechema:
Carlos Nuin, David Salinas, yo y David Senosiain.
Sentados Alejo y Antonio.

Panorama desde Petrechema: Bisaurin y Agüerri a la izquierda, Alanos y Atxerito
 después, Txamantxoia, Ori y la Mesa a la derecha.

Bajamos a muy buen ritmo y cerca del refugio ¡¡otra sorpresa!! nos encontramos con Xabier Zarranz y su familia que también han decidido acercarse a la montaña para disfrutar de este Sábado, tan oscuro al principio y tan luminoso ahora.  

Alejo y David Senosiain, al fondo La Pakiza

Detrás nuestra las dos cimas de la jornada

Corriendo hacia el refugio. Ezkaurre al fondo y Txamantxoia a la derecha

El verdadero objetivo de la jornada: huevos fritos con chistorra, bacon, lomo...
y cerveza, mucha cerveza !!!  
Todas las afotos aquí.  Mi ruta en el Garmin aquí. Salen 19,87 kmts con 1366 mts de desnivel pero falta la primera parte de la excursión. En el navegador de Carlos Nuin salían 23 kmts y casi 2000 mts positivos...

A las 13:57 en Linza tenía 258, así que me puse 4 uds de novorapid antes del almuerzo. En casa a las 18:00 tenía 84.

                                          


4 comentarios:

  1. Cansamontañas,que artista estas hecho,no me dejó de leer ni una batalla tuya, eres mi inspiración para gozar y disfrutar del deporte y yo como ti con diabetes,mucho ánimo campeón,disfruta todo lo que puedas en la posets,y gracias por muchas gracias por contarnos tus aventuras.mucha suerte y un saludo

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    1. Muchas gracias Mario!!! Me alegra mucho leer tus palabras, el primer objetivo de mis ladrillos es mostrar que sea cual sea la gotera que tengamos, podemos seguir rompiendo las zapatillas: bailando, corriendo, trabajando o saltando en el circo. Y en la Aneto-Posets hasta volaremos!!!! Y nos arrastraremos... jajaja!!!!

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  2. Carlos!!! Gran reportaje y buena foto. Espero juntarne contigo en alguna otra, un abrazo! Jesus Casabona

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    1. Gracias Jesús!! Seguro que vosotros pudisteis haceros la foto en la cima más a gusto que nosotros o por lo menos con más luz... Tenemos queda hacer una buena con José Luis, seríamos tres mosqueteros de los buenos, y este verano mejor que el próximo ¿Ok? Un abrazo campeón!!!

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