Correr, caminar, pedalear, trepar, nadar, saltar...Trabajar y VIVIR. La diabetes, una anécdota.

Siempre y cuando controlemos el ejercicio y nuestra glucemia en sangre. Esta enfermedad que junto con la obesidad está considerada la epidemia del siglo XXI permite llevar una vida activa perfectamente normal gracias a médicos e investigadores, profesionales apasionados que no dejan de trabajar para que mañana sea de verdad una anécdota. Hay dos tipos principales de diabetes: Tipo I y tipo II. La primera es la mía, la insulino-dependiente o también llamada infantil, porque en un alto porcentaje de casos se presenta a edades tempranas, aunque yo "debuté" con esta enfermedad a los 44 años. Mi sistema inmune falló y atacó a las células del páncreas que producen la insulina sufriendo a continuación los tres síntomas del libro o las "tres Pes": Poliuria (orinar mucho), Polidipsia (sed horrible a todas horas) y Polifagia (hambre, hambre, haaaambre).



¿Porqué a mí? Pensé. A mí que toda la vida he hecho deporte, que sólo tres meses antes terminé mi Cuarta Maratón en Donosti, a mí que no fumo, a mí que soy un chico formal: Buen padre y ejemplar esposo, a mí que hago la declaración de renta puntualmente y pago la contribución urbana y el impuesto de circulación religiosamente cada año... ¿Porqué?



El estrés que tantos sufrimos en mayor o menor grado, herencia genética, un catarro mal curado, la contaminación, el agujero de la capa de ozono... Médicos, familiares, amigos, vecinos y yo mismo apuntamos una u otra causa, pero lo cierto es que daba lo mismo. El caso es que mi cuerpo -mi páncreas- casi no tenía reservas de insulina y que ya no iba a producir más -o muy poca- y que iba a necesitar "pincharme" insulina todos los días.

domingo, 22 de noviembre de 2015

Y el Invierno asomó la patita...

... En la Sierra de Alaitz.

Una patita fría y blanca que vino en compañía de otros millones de patitas pequeñitas. Cayeron del cielo durante la noche y primeras horas de la mañana poniéndolo todo blanco, más blanco que la patena. El resultado ha sido una postal de Navidad, de ésas que se ven en Suecia o Canadá y que a nosotros siempre nos llaman la atención por lo inusual.


Había quedado con Nacho a las 7:10 en el poli de Zizur. Mientras desayunaba casi podía escuchar la lluvia afuera, en la calle.  Cuatro grados de temperatura en mi ventanómetro - ¡¡brurrrr, cómo debe estar el monte !! -, pensaba mientras bebía el café con leche calentito.  Confiaba en que la gente se echara para atrás y podía verme sudando en la cinta del gimnasio: una horica con buenos ritmos seguida de una sauna ¡¡la alternativa ideal para una desapacible mañana de Domingo!! ¿O no?

Pues no, Alejo me dice que en Pamplona casi no llueve y que ha ido a recoger a Marianela y que nos esperan en Irigaray, cerca de Noain, que ahí nos juntamos en un coche y salimos para Untzué a donde también llegarán Tedy y Alberto, con quienes estuvimos hace dos semanas en el Saioa.  También me dice que en cualquier caso, si está imposible, que echaremos unos cafés y nos volveremos.

¿Cómo le digo que no a este hombre?  ¿Y a Tedy, a Marianela o Alberto?  Con tantas dudas se me echa la hora y casi llego tarde al poli. Allí está Nacho con el coche tal y como hemos quedado, pero me dice que con el catarro que todavía no ha curado se quedará en casita. Me llevará a Irigaray y allí se vuelve. ¡¡Todavía quedan personas con sentido común!! Y con tos, también es verdad...

Reunidos los tres mosqueteros seguiremos ruta hacia Untzué por la nacional dirección Zaragoza, pasando el Puerto del Carrascal miramos de reojo el paisaje blanco: está nevando a gusto y casi cuaja en la carretera.  Llegados a nuestro pueblo preferido, después de un par de vueltas y despistes, nos bajamos junto a la iglesia y preparamos los aparejos. Mientras llegan Tedy y Alberto bromeamos con unos chicos del Run19 que también han organizado una excursión por la misma ruta que nosotros: la Carrera de montaña Hiru Mugak.  Podríamos ir con ellos pero decidimos ir a nuestra bola confiando en que recordamos el recorrido, sobre todo Tedy, que ha entrenado muchas veces por estos senderos. Mala idea, porque como luego veremos... No se ve casi nada.  ¡¡Y no llevamos la ruta en el gps!!

Aquí estoy con Marianela, Alberto, Tedy y Alejo
Mojados antes de salir ¡¡y con frío!!
Casi no nieva cuando echamos a correr, eso sí hace fresco: cero grados, y las nubes siguen ahí con su color gris blanco y amenazador.  Son tres kilómetros por pista que nos llevan por el fondo del valle entre fincas medio cubiertas de nieve, cruzando arroyos por pequeños puentes o saltando si no los hay.  Las zapas se nos mojan enseguida pero con el movimiento los pies se mantienen calientes, esperamos que sigan así. Por lo demás llevamos mallas largas, una camiseta o dos de manga larga y el chubasquero, además de guantes que yo por lo menos me quito enseguida para no mojarlos con el sudor, después los necesitaremos secos.  Mientras nos acercamos a la montaña se abre el cielo un poco y deja de nevar ¡¡bien!!


Marianela y yo cerramos la marcha pues nuestros compas de aventura vuelan por la pista sin esfuerzo ¡¡qué tíos y encima van charlando!!  Coincidí con esta chica el año pasado en una salida a las Bardenas con el club Corriendo por el Mundo, nos cuenta que el mes pasado estuvo en Marruecos participando en la Desert Run una aventura korrikolari por el desierto en tres etapas. Nos describe las sensaciones de correr por el filo de las dunas, el placer de bajar casi deslizando por la arena...  ¡¡Qué envidia!! Aunque hoy nosotros también disfrutaremos pisando un elemento raro en nuestras latitudes y que más arriba, conforme ganamos altura en el bosque es tan seco como la arena ¡¡y qué ruido más curioso hace !!

Así es, la nieve sopa del comienzo ha pasado a estar seca y cubre con abundancia el bosque y el suelo, Unos veinte centímetros que adornan cada ramita y que amontonada en los bojes, hacen a estos vencerse y cerrar el paso ¡agacharse tocan! Muy bonito todo ¿eh?







Hemos decidido seguir el recorrido largo que cruza la sierra y baja al otro lado, al valle de Elorz, es un recorrido que yo debería conocer bien pero al llegar arriba y asomar al otro lado la niebla se echa encima y con toda la nieve no hay forma de buscar la bajada. Decidimos darnos la vuelta y tirar por el recorrido corto que Tedy se conoce al dedillo.

Alejo y yo nos acordamos de hace dos años cuando también estuvimos por aquí dando vueltas y medio perdidos, la orientación sigue siendo nuestra asignatura pendiente pero yo tengo más delito porque por pereza ni siquiera he descargado el recorrido en mi Garmin.

Con Tedy conseguimos asomar al techo de la sierra sin más despistes. La gozamos por el intrincado laberinto blanco que los bosques de hayas y boj forman aquí arriba, un verdadero parque temático de Aventuras en Alaska donde sólo faltan unos lobos y algún oso ¡Ah no! que somos nosotros...




Toca seguir la cresta de la sierra pasando por sus tres cimas para después bajar al valle pero en un momento dado nos encontramos sin saber por donde tirar. Vuelve a nevar, la niebla no nos deja ver referencias y la vegetación se cierra por todas partes. Tedy cree que deberíamos perder altura hacia el valle de Elorz para luego volver a subir, pero no lo vemos claro así que decidimos apostar por lo seguro: darnos la vuelta, desandar nuestra excursión hasta la pista del fondo del valle y regresar.



La decisión es buena, nuestro equipo nos permite enredar lo justo y el frío empieza a morder, sobre todo en las manos, pero los pies tampoco tiran cohetes así que vamos, que hay muchos días para volver y repasar el recorrido.  A los quince minutos de habernos dado media vuelta nos encontramos con los Run19 entre los cuales encontramos caras conocidas y es que coincidimos en muchas carreras y rutas de montaña.  Una lástima que no nos hubieran pillado antes porque ellos sí tienen el recorrido en sus cacharros y aunque también dudarán al llegar donde nosotros, no les costará seguir la ruta que justo teníamos delante de nuestras narices.  Lo dicho, que ya estamos pensando en volver.

Encuentro con los Run19



En cuanto nos vimos de nuevo en la pista forestal comimos un poco y echamos a correr para recuperar el calor perdido entre la nieve.  La temperatura ha subido un pelín y los campos blancos muestran ahora el verde del cereal que apunta sus primeros brotes.

¡¡Una buena excursión!!      Todas las afotos aquí.

Poco después del km 5 retrocedimos para bajar altura
y coger la ruta corta hacia nuestra izquierda.

En rojo nuestro recorrido de hoy, amarilla la ruta a seguir.
Aquí donde nos dimos la vuelta.



Mis glucemias fatal: 250 a las 5:45 de la mañana, me he puesto 4 uds de novorapid y con todo el frío y la que nos ha caído no he hecho controles durante la marcha pero he ido tomando isostar, un bote de miel y naranja, una barrita y un pedazo de chocolatina que nos ha regalado Alejo ¡qué rica!  En Zizur hemos parado a echar un café con leche (el mío sin azúcar) y no sé cómo, en casa cuando me he mirado antes de comer tenía 300.  Lo peor es que tenía paella así que me he puesto 10 uds de novorapid y luego a las 5 de la tarde volvía a unos estupendos 105.  ¡Bieeeennn!

domingo, 8 de noviembre de 2015

Otoño en el País de las Hayas

Baratxueta desde el Puerto de Egozkue

Un Otoño primaveral, casi de Verano, que invita a salir y recorrer cualquier paisaje donde los árboles sean los protagonistas. Si vives en Pamplona lo tienes muy fácil: coges la carretera y tiras para arriba hacia los hayedos infinitos de Quinto Real o Irati por ejemplo. Hay mil sitios pero el Sábado decidí llevar a Peio y Santi al Baratxueta, que con sus 1149 mts es un excelente mirador: Saioa, Adi, Ortzantzurieta, las altas cimas de Belagua y hasta Collarada. ¡¡Ah y por supuesto Peña Izaga o la Higa de Monreal!! y Pamplona, pequeñita y lejana ocupando la Cuenca a la que da nombre. 

Casi todas las hojas han caído al suelo.

Salimos de Zizur a las 8:30, no hace falta madrugar mucho porque no hay muchos kilómetros hasta el Puerto de Egozkue al que iremos por Zubiri. Más arriba de este pueblo y poco antes de llegar a Eugui, en Urtasun,  dejamos la carretera principal y por el estrecho pero excelente carretil, trazaremos una docena larga de curvas hasta los 900 mts del puerto.  Nuestra excursión es fácil y cómoda pero nosotros la hacemos un poco más difícil subiendo "todo tieso" montaña arriba. Haremos unas risas resbalando en la húmeda alfombra de hojas y saltando vallas hasta que muy cerca de la cumbre salimos del bosque y disfrutamos del sol y un excelente almuerzo con la única compañía de dos caballos y un potro.  El silencio sólo se rompe por el leve aire sur que mueve las ramas y por algún lejano disparo de cazadores en los montes próximos.






Entre Santi y Peio, mis aplicados alumnos.
Collarada se distingue blanco por las primeras nieves



De vuelta al coche nos acercamos a Iraizotz, en el Valle de Ulzama, en cuya posada disfrutamos de unas cañas y unas chistorras sentados al sol.  De todos los pueblos de esta zona, Iraizotz puede que sea el más bonito.       Todas las afotos aquí.



Entreno por Belate: Saioa y Abartán.



Hoy Domingo hemos madrugado un poco más: eran las 6 cuando salíamos de Zizur con rumbo a Belate. David Senosiain, Nacho Beramendi y servidor nos hemos juntado en la gasolinera de Olaz con Alejo, Alberto y Tedy. De los seis yo era el más pelao con diferencia, pero Nacho me ha consolado al decirnos que estaba acabando de curar un catarro.  Sí, sí un catarro... la próxima no me ajunto con vosotros aunque tengáis la gripe malaya!!!

A las 7 de la mañana todavía es noche cerrada en el Puerto de Belate. Alucinamos cuando llegamos y vemos un grupo de unos 20 ó 30 cazadores reunidos junto a los coches.  Después sabremos que iban a la becada aunque también hemos visto gente en las palomeras que se levantan sobre el cordal que va de Saioa hasta Abartan, todavía quedará paloma de pasar... 

No hace frío, unos 8 grados. Encedemos los frontales y nos metemos por el sendero-pista que discurre junto al Hospital de Belate y que más arriba se cruza con el Camino de Santiago.  El aire de Sur pega fuerte en cuanto ascendemos al collado entre Gartzaga y Okolin pero cuando llegamos al lomo de la sierra ya no hablamos de viento sino de un huracán: las rachas de aire nos pegan de lado y dificultan el avance haciendo súper incómoda la excursión. ¿Qué velocidad tendrían? 90, 100, 200 kmts hora?  Lo que no sé es cómo a Tedy no se lo han llevado volando hacia Baztán, quizás se había echado piedras en los bolsillos porque nuestro flaco amigo pesa menos que una pluma... 

Flaco pero fuerte, tan fuerte como Alberto, nuevo en el grupo, un campeón que como nosotros viene del asfalto y que hace muy poco ha descubierto el placer de correr por los montes. Suele entrenar con Tedy y eso da una idea del nivel de nuestro joven compañero.  Después está David, que también está fuerte como el vinagre (en Izaga me sacó media hora por lo menos en meta), Alejo que cualquier día se nos va a hacer profesional  y el colega del resfriado, a quien no hemos oído estornudar ni una sola vez.  Yo estornudar no, pero resoplar... como una máqina de tren, pero de las viejas, de ésas que echan mucho humo y no andan.  ¡¡Esperarmeeee!!

Menos mal que más arriba, entrado en calor, he podido llevar el ritmo del grupo pero las primeras cuestas han sido terribles.  Después incluso hemos perdido un poco de altura hasta acometer la subida principal de la jornada a la cima de estos montes: El Saioa que con sus 1419 mts es el rey de la región, con permiso del Adi que tiene 1458 mts y cuya cima distinguimos hacia el Este. 

Primeras luces del Domingo con el Saioa delante nuestra.


Cuando he llegado arriba del Saioa mis compis esperaban resguardados detrás del vértice geodésico. Tedy nos ha señalado una punta lejana hacia el Norte: - ¿Vamos al Abartán? - y todos hemos aceptado lanzándonos montaña abajo en esa dirección.  En pocos minutos el aire nos ha dado una tregua al quedar al resguardados del viento Sur por montes más elevados.
  


David, Tedy, Alejo, Alberto y Nacho ¡¡A volaaaaar !!


Nuestra carrera nos ha llevado por una sucesión de toboganes superando algunas elevaciones como el Ekaitza (1175 mts) e Iturburu (1045 mts) hasta Abartan (1095 mts)  Aquí he recordado una excursión ya lejana en el tiempo, cuando en 2008 subí aquí junto con Alvaro Rodriguez y con Ignacio Toni desde Irurita.  Aquella jornada también sudamos la camiseta igual que hoy. 

Salvo algún cazador al que hemos saludado al pasar junto al puesto no nos hemos cruzado con nadie, claro que todavía era pronto. Al regresar no hemos subido al Saioa sino que lo hemos faldeado por una estrecha senda que, como una curva de nivel, discurre por su circo norte. La ladera cae con mucha inclinación sobre los hayedos y mientras corremos miramos de reojo los abismos poniendo toda la atención en cada apoyo.  Los árboles no lucen color alguno pues han perdido toda la hoja y el bosque es una masa gris y uniforme. 





Evitamos subir al Saioa por un sendero a media ladera

Llegados a Okolin nos cruzamos con los primeros grupos de excursionistas y próximos al hospital de Belate nos encontramos con Pedro, compañero del Trizurko, que ha venido con su familia a dar un paseo. El próximo Domingo estará en Valencia para correr la maratón, así que le deseamos mucha suerte y nos despedimos del campeón ¡¡seguro que hará un tiempazo!!




El parking que estaba desierto a las 7 de la mañana está ahora atestado de coches y es que la mañana está fabulosa para pasear quitado eso sí el aire que sopla en las cumbres.  Finalmente nos han salido 24,4 kmts y 1404 mts de positivo acumulado.  ¡¡No está mal!!

La ruta en mi Garmin

Todas las fotos








domingo, 1 de noviembre de 2015

Izaga Trail

Campeonato Navarro por Clubes de Carreras por Montaña. La Izaga Trail con 26 kilómetros y 1900 mts de desnivel positivo acumulado se presentaba por sí sola: una carrera dura de pelar y donde íbamos a sufrir como perros.  Para los amigos del Trizurko había de ser nuestra presentación formal en el circuito de carreras de montaña y confiábamos en que además podíamos comernos algo y subir al cajón, como así ha sido, consiguiendo el segundo puesto gracias sobre todo a nuestros campeones David, Egoitz e Iñigo que pensamos son los que más han puntuado, con ellos hemos estado Joseba, Fernando, Iñaki, Jean Michel y yo mismo, todos con los colores del equipo. Sin los colores en la camiseta pero sí en la cabeza, corrían Txitxo, Nico y Tedy y también Santi Oroz, Santi Petri, Alejo y Nacho, que se han acercado para animarnos ya que hoy no podían gastar las zapatillas.  Hoy corríamos todos, también los amigos que no han podido acercarse al pequeño pueblo de Ardanaz. Y lo hemos conseguido. ¡¡Zorionak Trizurko!! 


La organización ha trabajado a tope todos los detalles, incluido el aparcamiento, situado a las afueras del pueblo (dentro hubiera sido imposible), así que no hemos perdido ni un minuto en dejar el coche a eso de las 8 de la mañana.  Los dorsales los hemos pillado en la plaza donde había dispuestas varias mesas para que todo fuera con rapidez. Según tengo entendido esta primera edición ha surgido como idea de un grupo de estudiantes de economía de la Universidad de Navarra, como un trabajo práctico de empresa. Han contado por supuesto con la colaboración del ayuntamiento de Izagaondoa, que es como se denomina la agrupación de municipios del valle: Ardanaz, Reta, Zuazu...  También me han dicho que el club Txurregi ha colaborado sobre todo en el diseño del recorrido. Entre todos han conseguido que la empresa haya llegado a buen puerto ¡¡Enhorabuena también!!

** Uno de los organizadores me ha corregido estos datos: La carrera surgió como un proyecto multimedia universitario de la facultad de comunicación. El proyecto continuó voluntariamente por ellos (los organizadores) desligado de la universidad y sí que tuvieron alguna ayuda por parte del Txurregi pero no en lo que se refiere al recorrido. 

165 corredores inscritos a la prueba larga de 26 kmts y casi otros tantos a la de 10 kmts así que mucha gente y caras conocidas en la plaza de Ardanaz. A quien primero he saludado ha sido a Gorka, un mozo de Zaragoza que se ha acercado hoy con la familia, su señora es del pueblo de mi madre así que me he alegrado mucho de saludarles ¡¡Viva Villarreal de Huerva!!  Los colegas del Txurregi, con Xabier Zarranz a la cabeza no podían fallar y los del Run-19 tampoco ¡¡estamos en su montaña preferida!!  Una alegría también ver a Victor Amatriain ¡¡menudo txapeldun!!, a Fernando Zaratiegui a Joxan Salgado y a Jerónimo, recuperado ya de una lesión puñetera, seguro que muy pronto estará al 100%  y qué suerte que podremos correr con chicas guapas como Irene del Run-19 o Mónica Grajera, unas campeonas que han acompañado en el cajón a la campeona de la prueba: Maider Fraile. Tres neskas guapas, guapísimas y valientes ¡¡Olé!!

Con Gorka del Club andaandaeh
David Salinas de Adi Ike, correrá los 10 kmts

Santi, Iñigo, Nico, Iñaki, Joseba, Jean Michel, servidor y Alejo
Abajo sentados: Fernando, Txitxo, David y Egoitz

La mañana buenísima ¿no lo había dicho todavía? Algunas nieblas agarradas en el valle o en los montes que a poco de subir el sol han desaparecido, dejando un cielo azul-noviembre maravilloso. La temperatura unos 8 grados pero en cuanto han dado la salida a las 9 en punto de la mañana hemos entrado en calor, si alguno era friolero solo ha tenido que esperar a la primera cuesta por la pista para olvidarse de la bufanda.

Los primeros 4 kilómetros -así a ojo- han sido por pistas ¡¡y cuesta arriba!! así que yo por lo menos me lo he tomado con calma, resoplando y con el corazón en la mano, pero con calma jeje.  He tardado en encontrar mi sitio porque no dejaban de pasar corredores para delante pero la carrera era larga y el objetivo era llegar ¡¡que puntúen los jóvenes!!

Nos íbamos acercando a la montaña al mismo tiempo que le dábamos la vuelta hasta que hemos llegado a su flanco Este y por buenos senderos hemos empezado a ganar altura, el pino silvestre ha dado paso al quejigo, la encina y el boj, un apretado bosque que cerraba el estrecho pasillo vegetal de nuestra excursión. Encima nuestra las fajas rocosas de Santa Agata, la primera de las puntas que debíamos superar.  Desde el primer kilómetro estoy siguiendo los pasos de Juan Martín Tirapu y sigo detrás suya mientras trepamos entre los bojes, - ¡me estás llevando muy bien!- le digo para pincharle un poco, pero al veterano de Noain no le importa y no baja el ritmo ni cuando le pregunto si ha visto alguna seta ¡¡menudo pájaro!! está fuerte el jodido...  También voy un buen rato con Gorka, le quería plantear hacer una carrera al San Bartolomé, ahí en Villarreal, pero los dos vamos con la lengua fuera y justo podemos resoplar, ya hablaremos...






¡¡Martín espérameeee...!!

Cerca de la cima y al abrigo de unos bojes me saluda una pareja: son Txuri y Mauri, bien acompañados por Senda, una galgo montañera como pocas. ¡¡Qué alegría recibir tan buenos ánimos aquí arriba!! Los Adi-Ikes están en todas partes, aunque hoy sólo corren Jose Antonio Beriain y David Salinas en la corta, creo.

Hace fresco arriba, una ojeada, una foto que me hace Txema de la AVC ¡¡gracias!! y para abajo que se me escapa Martín. Sigo detrás suya y procuro que no se escape. Juntos adelantamos a una chica e iremos perdiendo altura a buena velocidad. Martín tiene la costumbre de los entrenos con los de la Vuelta de advertir cada obstáculo: ¡piedra! ¡rama! ¡agujero! me hace gracia cuando al fallarme las fuerzas y quedarme atrás le sigo oyendo más lejos, con el ruido de la carrera ni se entera jejeje


Martín liderando un grupo de corredores en la segunda subida

Es muy bonita esta parte, pero muy dura. Estamos en las laderas que miran al Sur, una zona de toboganes que se va haciendo más dura conforme más kilómetros llevamos. Pronto habremos de subir a las proximidades de la ermita para bajar por la pista hacia Zuazu, pero antes sufriremos un subi-baja agotador.  Hemos pasado varios avituallamientos, llegamos a uno que tiene agua, isotónico, frutas y chucherías. Yo me limito a echar un trago de isotónico y rellenar mi botella. Hace un rato que también he tomado un "jarabe" de Isostar con cafeína y gracias a él puedo enfrentar la segunda y durísima subida gorda de la carrera.  Vuelvo a tener a la vista al bueno de Martín pero no hay modo de pillarlo. Detrás mía oigo dos chicas que suben en "animada conversación" qué envidia, ¡vaya campeonas!!  me alcanzan casi cuando llegamos arriba, pero las dejaré atrás en un avituallamiento a ellas y a Martín.

Bajando a la carrera también doy caza a Edorta y a Dani, del Txurregi, el primero ha estado unos días pachucho y por eso que le alcanzo, sino de qué, mira tú en Canfranc que se me escapó y me sacó unos buenos minutos en la meta...  Corremos como ceporros un kilómetro o más por la pista pero enseguida un voluntario señala un sendero que nos volverá a castigar con un rato de toboganes. Asomamos a unos cortados encima de Zuazu y Reta, los dos pueblos están muy abajo todavía así que podremos disfrutar aún de un buen descenso antes de ¡¡volver a subir!!

Iñigo lanzado creo que en la última bajada hacia Ardanaz

En el último avituallamiento nos prometen que es la última subida, no he hecho ni parar, otro botecito de cafeína, un trago del bidón y para arriba. Las dos chicas de antes me pillan en la subida donde están más fuertes que yo, lo mismo que Martín.  A este último pienso que lo podré agarrar en la bajada pero al llegar arriba ni le veo, el pájaro está mucho más fuerte y se ha tirado volando hacia la meta. Yo también me tiro y puedo dar caza de nuevo a las dos chicas (no hay cortesía en las carreras jeje), las patas están muy justas y vigilo que no se me suba el isquio, que lo noto hace rato ahí ahí, pero ya estoy en Ardanaz. Iñigo y Santi que ha venido con su hija Triana, me animan con toda la alegría del mundo y por fin me veo corriendo bajo el arco de meta. Tres horas y cuarenta y seis minutos ¡¡Bieeeeennnnn!!   Clasificaciones aquí.

Todas las afotos, las mías y las que he pillado por ahí...

la ruta en mi garmin aquí

En meta hemos disfrutado un buen rato mientras la organización hacía entrega de los premios para los primeros clasificados en cada carrera y categoría así como a los primeros tres equipos. Muchas gracias y enhorabuena a todos!!!! Mila Ezker, Zorionak!!!

Foto de familia

Con David, Fernando y Martín
Menos David, los otros tres somos los más abuelos, Aúpa los Aitonak!!

Santi bien acompañado de Triana

Los primerísimos de la general, ¡¡Ese Xabier!!

Los primerísimos veteranos ¡¡Ese Tedy!!

Las primerísimas ¡¡Esa Mónica, esa Maider y esa Irene!!

Aúpa los Run-19 !!!!

Aúpa los Trizurko!!

Aúpa Txurregis txapeldunak !!

Otra fotico de familia

Los organizadores, Zorionak !!!!

Mila Ezker!!!!
Y sobre todo gracias a nuestras familias que a menudo
 se mosquean cuando llegamos un pelín tarde a la comida del Domingo...